solst4En astronomía el término solsticio, que proviene del latín, solstitium, (sol sistere, que significa sol quieto), se refiere a la época del año en que el sol, en su trayectoria aparente, se halla sobre uno de los dos trópicos, dando lugar a la máxima desigualdad entre el día y la noche. La inclinación de la Tierra en el Hemisferio Sur está más cerca de Sol y en el Hemisferio Norte está se encuentra más alejada del sol, (solsticio de verano). Este fenómeno tiene lugar entre el 21 y 22 de diciembre. Son fechas aproximadas debido a las irregularidades del calendario gregoriano y los años bisiestos.

El solsticio de verano, la puerta de los hombres

Historia y tradiciónsolsticio-verano_1La celebración del solsticio de verano como tal data de 5000 años antes de Cristo a raíz de la permanente observación de la bóveda celeste por parte de sabios astrónomos-astrólogos. Los antiguos griegos definían este acontecimiento referente al Sol como una puerta de entrada a otra dimensión, el sol mermaba día a día porque penetraba en la dimensión del espíritu de los hombres, primero lucía en el exterior para después lucir en el interior. El espíritu  se recoge sobre sí mismo para asimilar las experiencias vividas que el sol interior ilumina. A esta Puerta imaginaria la llamaron Puerta de los Hombres. Al solsticio de invierno lo llamaron la Puerta de los Dioses.

El hombre sólo puede llegar a la luz, a conectar con los dioses del Olimpo mediante una introspección, cruzando la puerta del inconsciente. Más tarde la mitología romana se referirá a las Puertas Solares como las dos caras de Jano, el guardián de las Puertas, el dios que simboliza la transición del pasado al futuro, de la vida a la muerte y el renacimiento. Jano tiene influencia sobre las cosechas y sobre la luz y la oscuridad.

Muchas otras culturas han celebrado y siguen celebrando este fenómeno cósmico porque el Sol es para todos una fiesta, un principio de vida,  la continuidad de la existencia y el primer logo o divinidad con la que la humanidad se identificó. Numerosas leyendas también dejan constancia de la existencia de Puertas invisibles, que lo son a simple vista, para los ojos físicos, pero no para la percepción más trascendente del ser humano durante este momento mágico. Dicen que los espíritus más puros, los guías de luz logran también acceder a nuestra dimensión durante el festejo del solsticio para comunicarse con nosotros.

baile-al-fuego

En la cultura celta los druidas celebraban el ritual de Alban Heruin, que consistía encender hogueras buscando la bendición para las tierras y sus frutos, así como buenos augurios para los enamorados y fertilidad para las mujeres. La magia de los druidas invocando a los Elementales, es decir a los espíritus de los elementos de la naturaleza, las Salamandras del Fuego, las Ondinas del Agua, las Sílfides y Elfos del Aire y los gnomos de la Tierra, son parte de una tradición que nos ha dejado numerosas leyendas y mucho folclore musical.

En Méjico, los guerreros aztecas dedican muchos rituales al culto solar para que la “renovación de los fuegos”, ayude a la tierra y al ser humano a respetar los ciclos y a obtener buenas y abundantes cosecha, así como salud.

Los Incas del Perú festejan el Inti-Raymi, la fiesta del Sol. Es un espectáculo ver en la explanada de Sacsahuamán, muy cerca de Cuzco, las llamaradas de las fogatas que invocan al astro rey antes de la salida del sol.

En la tradición hindú el solsticio estival es la vía de los ancestros, la pitri-yana, igual que para los griegos, una puerta que conduce al interior. Los Indras adoran el fuego primordial y aseguran que algunos chamanes durante el ritual del fuego pueden leer el futuro en las llamas. Las cenizas de las hogueras durante el solsticio se conservan todo un año.

fuego

Entre los beréberes de África del norte de Marruecos y de Argelia, se celebra la fiesta del Ansara el 24 de junio. Encienden hogueras en las plazas de los pueblos, en lugares que consideran que necesitan una purificación. Arrojan al fuego hierbas medicinales. Ahúman después sus principales utensilios, herramientas y objetos personales. Consideran que el humo de las hogueras protege los campos cultivados y mata los virus y las malas energías. Seguidamente saltan siete veces por encima de las brasas, purifican también el interior de las casas y los enfermos con ramas encendidas para ahuyentar los malos espíritus e inmunizarse el cuerpo. Esta tradición procede de la cultura pre-islámica porque se basa en el calendario solar, actualmente el calendario musulmán se basa en el calendario lunar aunque se siguen conservando muchos de estos rituales.

El solsticio de verano, una iniciación

fuego-2

Coincidiendo con el periodo del solsticio, en esta fecha se celebran muchas tradiciones religiosas que reconocen la importancia de los ciclos naturales y al sol como astro que nos permite la vida, a la naturaleza como madre que nos da sus frutos; pero también los rituales iniciáticos que tienen como propósito recrear la magia, cruzar la “Puerta”, dar el salto de una realidad a otra, la posibilidad que quemar todo lo viejo, mediante el acto de arrojar al fuego de las hogueras todo lo inútil, lo que ya no puede convivir con la nueva personalidad naciente. De la misma forma que todo es cíclico, nuestra naturaleza interna también tiene que renovarse.

De todo ellos se desprende el sentido mágico de la fuerzas de la naturaleza. Suelen recolectarse en esos días del solsticio diversas plantas medicinales porque se ha comprobado que su poder curativo se multiplica considerablemente. Se recogen diversas variedades, como el hipérico o hierba de San Juan, la Manzanilla o Abrótano hembra, la Artemisa, la Milenrama, el Saúco, el Gordolobo, la Pulsatilla alpina, la Onagra y la Perpetua, el Espliego, el Romero, el Tomillo. Esas propiedades medicinales aumentan gracias a la especial radiación del Sol en el solsticio y también a la exhalación del vapor de agua llamado Floscoeli (flor Celeste), también llamando Flor de Agua, que se forma al amanecer, es el rocío solsticial.

Como este acontecimiento solar se relaciona con la purificación, la prosperidad, la abundancia y la fecundidad, algunas tradiciones populares cuentan que al amanecer del primer día de verano, las mujeres de los pueblos iban a recoger de las fuentes y de los manantiales la Flor celeste o Flor del Agua y se la bebían, creyendo firmemente que encontrarían a la pareja adecuada, se curarían de algún mal, o podrían concebir hijos. Durante este ritual solían entonar cantos específicos dedicados al rocío.

solsticio-de-verano

La tradición de esta fiesta de raíces milenaria se sigue celebrando en muchos lugares del planeta y en todos, las costumbres son muy similares. Coinciden en el encendido de hogueras purificadoras o de adoración al Sol. En algunos sitios también se complementa con baños al amanecer, como un ritual de bautismo. Entrar en el río o en el mar para limpiar las emociones para después dar tres vueltas en sentido contrario a las agujas del reloj alrededor de la hoguera. Este acto simboliza la purificación, para terminar se saltan por encima de las brasas entonando algún mantra u oración de transmutación. Es común también que en la fogata cósmica se quemen enseres viejos, intenciones escritas en un papel y que se celebre la noche con cantos y una ofrenda a la tierra.